Algunos lotes de producción del departamento Paraná se vieron severamente afectados en estados reproductivos tempranos. Debieron ser tratados químicamente por un rápido avance hacia las hojas que definen el rendimiento como la hoja de la espiga, la inmediatamente inferior y la superior, según publicó Sin Mordaza.
Mientras en la provincia avanza la trilla de los maíces de primera, desde el INTA Paraná informaron la detección de ataques severos de roya polisora en lotes sembrados con maíces tardíos.
El Sistema de Información de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos (Siber), en su reporte de la última semana, había evaluado que los cultivos de maíces tardíos y de segunda se encontraban en condición muy buena (15%), buena (58%), regular (26%) y sólo el 1% en condición no adecuada. Las condiciones climáticas durante la etapa de floración en los lotes de producción más avanzados, en algunos casos, coincidió con un período de escasas precipitaciones y en otros, ocurrió la situación contraria, con exceso de precipitaciones que podría haber provocado polinización deficiente.
Los lotes sembrados más tarde están en plena floración y los más tempranos en etapa de llenado de granos.
Un informe técnico elaborado por la fitopatóloga Norma Formento recordó que la Estación Experimental Agropecuaria Paraná del INTA oficializó la primera detección en nuestra provincia de roya polisora –científicamente llamada Puccinia polysora–en 2010, mientras en Argentina se fue identificada en el ciclo 2000/01 en Tucumán y en 2007/08, en el norte de Santa Fe. “En Entre Ríos está presente anualmente con baja incidencia, y, en la campaña 2013/14, al estado R4-R5, se observó en hojas inferiores de maíces tardíos sin ninguna implicancia negativa para el rendimiento”, agrega el informe.
En la última semana de la campaña 2014/15, señaló Formento, redes de híbridos de Aapresid (Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa) evaluadas en los departamentos Diamante y Paraná “permitieron detectar diferentes respuestas de los híbridos, a la roya polisora en los estados R1 y R2”, cuyos datos aún no han sido publicados.
Algunos lotes de producción del departamento Paraná, remarcó la profesional, “se ven severamente afectados en estados reproductivos tempranos” y debieron ser tratados químicamente “por un rápido avance hacia las hojas que definen el rendimiento como la HE (Hoja de la Espiga), la inmediatamente inferior (HE-1) y la superior (HE+1)”.
Diferenciación. Una herramienta muy sencilla de diferenciación a campo de ambas royas, apuntó Formento, “es que en nuestras condiciones, en maíces de segunda o tardíos, se saldrá con la vestimenta de color anaranjado por la roya polisora, lo que nunca sucede con la roya común”.
La fitopatóloga del INTA local, ante esta situación, recomendó a los productores y asesores técnicos involucrados con el cultivo de maíz de Entre Ríos “prestar atención a esta enfermedad, reconocer adecuadamente los signos (pústulas urediniosóricas) y registrar los niveles de presencia (o ausencia) de la roya polisora, para caracterizar híbridos en un ciclo con condiciones conductivas”.
Es posible, añadió, que su aparición sea esporádica, aunque eso “no la hace menos peligrosa y limitante en campañas con altas temperaturas y lluvias”. La roya polisora, además, aparece asociada al tizón foliar común –Exserohilum turcicum, su nombre científico– que se presentó con características severas en híbridos susceptibles, recordó Formento.
Formento, finalmente, destacó que la ocurrencia de pústulas de la roya común –denominada científicamente Puccinia sorghi– actualmente es mínima en maíces tardíos de la provincia, a diferencia del noroeste de Buenos Aires donde predomina ampliamente esta roya de climas más templados.
Buenos rindes
El Sistema de Información de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos (Siber) reportó que en el ámbito provincial se han trillado alrededor de 135.000 hectáreas sembradas con maíz de primera, valor que representa aproximadamente el 72% de las 188.500 hectáreas implantadas en la presente campaña.
El rendimiento promedio provincial ha vuelto a experimentar variaciones con relación al informe anterior del Siber, con un incremento de 200 kg/ha ubicándose alrededor de los 7.800 kg/ha.
En las zonas oeste y sur de al provincia el rendimiento promedio trepa a los 8.000 kg/ha.
En al zona núcleo, en tanto, la Guía Estratégica para el Agro (GEA, de la Bolsa de Comercio de Rosario, informó que el maíz de primera se destaca con un rinde medio de 110 qq/ha en el 27% de la superficie cosechada. Los resultados obtenidos varían de 130 qq/ha, en los mejores híbridos, a 93 quintales. Estas cifras elevan los pronósticos a cosecha a 108 qq/ha, es decir tres puntos más respecto de la semana anterior.
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